Últimamente se ha comentado bastante sobre el proyecto que busca reducir la jornada laboral en Chile de las 45 horas semanales a 40, causando opiniones divididas entre las empresas cuestionando si es algo positivo o no para la productividad del país.
Nosotros nos sumamos a este tipo de iniciativas, como parte de nuestra Cultura Klever y junto al propósito que nos mueve, el cual se enfoca en las personas y sus interacciones, siempre estamos en la búsqueda de tener a los colaboradores felices y energizados, liberando su potencial y que éste también repercuta en el de nuestros clientes.
Dicho esto, hoy anunciamos que damos el pie inicial a un experimento para reducir nuestro horario laboral, con el objetivo de seguir buscando la mejora continua y el bienestar de las personas. Nuestro modelo consta de bloques de horarios flexibles y miércoles “black out” para el equipo Core de Klever, dando como resultado una jornada de 36 horas semanales.
Para lograr mejorar la productividad en menos horas se requiere estar bien comprometidos con los objetivos y organizar de una manera eficaz el tiempo de cada día, lo cual hemos podido ir trabajando a lo largo del tiempo con iniciativas muy apegadas al marco de trabajo Scrum en nuestro equipo.
Apostamos a una mejor productividad preocupándonos por el bienestar físico y mental de nuestros colaboradores e invitamos a las empresas a evaluar la felicidad de las personas y a arriesgarse a estos experimentos, que en nuestro caso estamos seguros repercutirán de forma positiva y asombrosa.
